Este loft de 150 m2 totalmente diáfano (excepción hecha del baño) y con una altura de techo de más de 3 m, tiene un sistema de calefacción con bomba de calor. Su dueño, cansado de pagar facturas de electricidad desorbitadas, de no tener en su casa una temperatura confortable, de tener el aire siempre en movimiento y cansado también del ambiente seco, decidió cambiar de sistema de calefacción.

La solución la ha encontrado con ThermIQ. Ahora puede controlar la temperatura de su loft por zonas porque el sistema de calefacción de ThermIQ tiene la propiedad de crear micro climas en superficies diáfanas. Cada radiador está conectado a un termostato y tiene asignado una temperatura de confort que oscila entre los 21ºC y los 17ºC en función de si se va estar o no en una zona determinada de la casa.